El sabor de las cosas que quedan sin resolver.
La esperanza de encontrar, una vez más, la chance.
O al menos, de tener la posibilidad y crear el momento, -porque se confecciona- piensa.
No dormir.
Si se acumulan son horas, tanto tiempo pensando en el cómo; porque no tolera que las situaciones no terminen como deben, que el lazo que envuelve el final empaquetado no este atado, ni siquiera tejido.
Siente miedo.
¿y si jamás pasara?...
Se decide, confiada como quién enfoca y arranca al ataque, en salir a la búsqueda exhaustiva de ese minuto que la llevará a la gloria, por darle justicia a todo aquello que ya ha muerto desordenado.
________________________________________________________________________
Y yo si sé que puedo a encontrarte, te buscaría...
Pero no tengo el espíritu de cazadora, y vos no sos una presa a quién atrapar.
Mejor, si tenés ganas, cazame vos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario