martes, 14 de septiembre de 2010

cnrl + alt + z

Cuando miles de capítulos por arte de magia desaparecen en tu mente, empezás a cuestionarte que algo anda, contrariamente a como estabas un tiempo atrás, demasiado bien como para preocuparse... o demasiado bien para entrar en desconfianza.
Que algo anda es un hecho, la felicidad no brota de las napas porque sí.

Muchas cosas pasan cuando vos no estás mirando, y muchas más pasan mientras vos estás prestando atención a algo minúsculo. La suma de todos los factores de 'lo que pasa' es una historia que ni tu conciencia puede creer, una historia que te sorprende a vos, la misma protagonista, concluyendo que los acontecimientos son mucho mejor de lo esperado cuando tu mente piensa en blanco en vez de negro. Blanco es luz, es positivismo, blanco es señal de que todo está liso y sonrientemente limpio. 'Pasar algo en blanco' en miles de contextos significa aclarar, dejar los borroneos de los planes futuros y tomar cartas en el asunto para que quede claro, consiso y directo; y entonces, pasar tus momentos en blanco no toma otra denominación que empezar a pensar en lo que se viene y en el ahora que producirá lo bueno en vez de dar vueltas sobre el mismo círculo encontrando problemas en vez de soluciones.

Pero al pasar en blanco te das cuenta de las páginas que tu mente suprimió por puro aburrimiento en ese tiempo que te ocupaste de disfrutar la felicidad como se debe. Suprimió porque estaban mal, estaban tachadas, ilegibles, y además eran súmamente irrelevantes. No quedan en la deriva, como papeles al viento, sino que están ahí, estúpudamente ignoradas como niño que quiere ocultar algo inmensamente roto detrás de sus pequeñas manos, pero ahí: presentes y materializadas. Alguien tenía que hacerse cargo de ellas, y quién mas que tu archivo de recuerdos para ocuparse de acomodar todo ordenadamente, para que no se te escape nada. Y tu memoria, la que pone las etiquetas, te dice que son -figurita repetida-.
Acá, en este hueco, hay algo que ya ha pasado... es como un error 404, que te dice "acá hay algo mal", acá hay algo que está gravemente mal.
Y yo encontre peor ciego que el que no quiere ver: al alma cuando se pone en testaruda, cuando lo quiere y no es que no ve, sino que no siente. No siente ni que se está abollando, se está quemando, se está desintegrando. No siente ni a su propio sufrimiento, el alma negada es peor que mil enamorados juntos, porque si pudieramos juntar el poder de negación de la realidad que pone el alma, no sólo se multiplicaría Hiroshima x 10, sino que terminaríamos asombrándonos de que es capaz de destruir el mundo entero. No exagero, un alma negada, un alma como la mía cuando se niega tan rotundamente a ver lo que estaba claro, es súmamente intolerable.

Pero vengo a atar cabos, porque la memoría ha rellenado ese hueco que no se entiende; a pesar de que no ha pasado nada de tiempo, que en la historia total serán sólo minutos, son minutos intensos, son minutos que explican mas que los días y meses que he pasado en ceguera.
Gloriosos minutos.

5 comentarios:

M dijo...

Me encanta como escribis y te doy toda la razon con respecto a todo
espero que andes bien
besotes

SantitAh dijo...

Pero el blanco es sinónimo de la nada también... es un nuevo comienzo... pero a mí se me viene la nada misma

Me dijo...

Me gusta tu blog, mucho :D
Te sigo (seguidora num. 100!)

Jo.

El alter ego de Mabel dijo...

dios mío, cuidado con lo que escribís porque yo leo y apreto

Meli dijo...

Loca linda, vos estas muy loca, y me agrada que seas mi amiga. Sí, yo soy amiga de la que tiene pelo magenta, (de adentro y de afuera, eh?) Como mirta que es rubia por dentro y por fuera. Yo te voy a hacer una síntesis bien concreta, como decimos en mi barrio del conur b "Son todos puto'"


Y con eso se terminan todos los problemas eh? Considerando que los problemas tengan que ver con muchachos, que en general siempre los traspasan, los ahogan, los atraviesan como si fueran transparentes. Porque nosotras somos TAN jodidas, que hasta le encontramos el problema al tipo que no tiene problemas, entonces ahi es cuando una dice "los bardos lo traspasan" porque siempre va a haber un bardo, y el bardo soy yo.
Pero una al final... es una persona feliz? O no?

Te quiero loca mímica.

pd. como se nota que te gusta Galeano!