miércoles, 26 de septiembre de 2012

Ganancia y pérdida.

Cuando pensás "definitivamente le alegré el día a aquel que encontró mi cartuchera", significa que estoy de muy buen humor y eso hay que contarlo públicamente.
Mucho mejor... porque en otro momento le hubiese estado deseando al que sabe que es mía y no la devuelve (porque la reclamé públicamente y por supuesto nadie me contestó) un final de cursada lento y doloroso.
La pena es que me va a costar mucha plata recomponer todo lo que tenía adentro, más cuando la vas llenando de a poco con cositas de por aquí y allá, y tenés todo lo que necesitás (incluyendo dos sets de cuchillas que podría haber dejado en casa) pero ¿qué importa? gané muchísimas otras alegrías en esta semana que tienen mucho mas valor como para que me importe algo tan tonto. Infinitas.
No hay nada que lamentar demasiado... salvo por la tijera de mi abuela que era mi favorita.Y esa trama que me había salido tan linda...
¡pero gané muchas cosas!
Sí, y hermosas.
Espero que no se vayan por donde vinieron, eso solo.
O como la cartuchera: no quiero olvidarlas en algún lugar.

Ser positiva tiene sus cuestiones.
Quiero ser así todos los días.

lunes, 24 de septiembre de 2012

hoy no.


hay días que sirve hay días que no.
hoy...

hoy no lo entiendo.
Me pregunto ¿por qué a mí?
Las angustias se enriedan en mis tobillos y me hacen tropezar, a veces hasta caer, pero no las puedo nombrar; si las largo siento que me atrapan y castigan arrastrándome con ellas entre miles de piedras que se formaron al corroer el piso en nuestro caminar. Porque sus cuerdas son mis dedos, y mis manos, y hasta los cabellos que coloreo; pienso que lo son todo.
Es muy difícil alejarse de las cosas que te hacen mal
cuando probablemente es tu entera vida la que te hace mal.
No se como arreglarlo, solo se lamentar y llorar.

Hay días que sirve de consuelo, hay días que no.. y se nota.
Hay días que el consuelo se va por donde vino, tan vacío que te hace notar que era puro ruido,
y empezás a odiar todo lo que tenés,
y solo querés desaparecer.

¿cómo se sentirá? el todo, al menos como se sentirá ser otra cosa.
¿cómo se sentirá irse? no mas sola que esto
no mas dolor que esto,
no puede ser posible. No puede ser verdad.
No voy a pensarlo más.

sábado, 22 de septiembre de 2012

Cantidad de cosas.

Pasaron los años pero lo único que persiste es la sensación de estar sola.
Cuanta gente he perdido.
Cuantas horas, cuantos momentos.
Solo estoy yo entre toda esta cantidad de cosas.

No puedo dejar de decir siempre lo mismo,
pero nadie al final del día le importa.
Mi universo es un poco más lindo, no quiero volver a salir de él.
Mis días más brillantes se formaron de la propia soledad. No me molesta ella, me molestan los demás que la estorban.

entre humanos y fantasmas

No quiero perderme en mis propios caminos,
no otra vez,
y no para siempre.
Quiero encontrarte a mi lado sin temerte,
y creerte sin dudar tanto.
¿Sos como te veo? ¿Serás un fantasma como todos los que inventé? ¿Te vas a escapar también en el amanecer? porque ya estoy cansada de ser abandonada...
¿Y sujetarías mi mano suavemente si tiemblo al despertar? Porque también estoy perdida y ahora solo se extrañar, no puedo tomar cosas nuevas que después se que se van.
Quiero pensar en vos, como lo hago ahora, pero sin que en el fondo se sienta mal.

Ya no puedo equivocarme, no hay margen de error; seguir cuesta mucho, cada día me alejo más del ayer y es confuso si sé que cada decisión anula un poco más todo lo que logré hasta ahora, lo poco y nada que pude armar.
Pero desearía seguir aún así, aunque sin la sensación de estar equivocándome a cada paso que doy- eso es lo que molesta, no el destruir sino el ser destruida. 

Qué desastre, sabía que todo volvería a la normalidad.
Me hiere tanto la realidad, la odio.
Sabía que no duraría para siempre.
Y ahora esto... por ahora por favor no te vayas, no todavía, que tengo mucho miedo.

miércoles, 19 de septiembre de 2012

hay alguien más

La miré y lo entendí... ella se sentía como yo.
Sorprendentemente no le estaba hablando al espejo, había alguien mas en el mundo que estaba así. Lejos de sentirme acompañada, tuve un poco de bronca... ¿quién es la crueldad para irrumpir en nuestras vidas de esta manera? no hay derecho.
Menos cuando detrás de esos celos hay tanto sufrimiento.
Quise decirle que la entiendo, quise abrazarla porque su dolor es en definitiva mi dolor, darle palabras de aliento que poco sirven ahora, pero de vez en cuando consuelan tontamente.
Desearía haberle mentido, tranquilizarla, explicarle que con el tiempo pasa y se olvida,
que las apariencias engañan mucho, y con el correr de los días descubrís que no es tan asombroso.

El problema de lo asombroso es eso: ya es demasiado.
Una vez que lo notás- cagaste, nena, cagaste.
Podríamos aliarnos...
aunque terminaríamos matándonos.

De todos modos te entiendo.
Nuestro abandono... es soportable.

domingo, 16 de septiembre de 2012

untitled 2

-Y dale con los sueños..
-Pero ayer soñé con vos, y fue en serio, lo soñé.

Soñé que te perseguía, ¿entendés? te perseguía por todos lados, por un millón de caminos y un millón de vueltas. Pasé varias veces por el mismo lugar, y se sentía siempre distinto; no importa el lugar, me daba cuenta, no era tonta: estábamos geográficamente ubicados en la misma posición, y siempre vos más lejos. De a ratos miraba tu silueta descansar en el horizonte, de a otros podría decir que casi la tocaba por la espalda. Debe ser por eso te perseguía, quería alcanzarte alguna vez, seguirte el ritmo...

Fue rarísimo, teníamos la costumbre de siempre huir el uno del otro, cada vez que vos estabas cerca yo daba un paso atrás, pero como si eso pasara en la realidad, eran movimientos sutiles.. vos te acercabas tan poco que si no estaba atenta podría no haberlo notado. Quería que te me acerques, ¿entendés? lo quería demasiado, pero siempre con miedo en la sangre, se me revolvía, se me evaporaba.. así hasta el final cuando casi te tenía.. casi.

-¿y qué pasó después?


Bueno.. No se que pasó después, me desperté sola y un poco asustada.
Algo que no quiero recordar habrá pasado.
Intuyo que algo que tiene que ver con esos dos mismos lados que hablaba hace unos días.

jueves, 13 de septiembre de 2012

prefiere la noche

Me dejarás dormir al amanecer entre tus piernas,
sabrás ocultar(te) bien y desaparecer entre la niebla.

¿ya dije que tengo dos mitades no?
Ahora es un buen momento para recordarlo: no nos estamos llevando bien at all. Termina la semana y sigue pasando.. Va a empezar otra, quién sabe lo que se vendrá.
Mitad de mes... que mes tan raro.
Como me gustan los meses raros.

martes, 11 de septiembre de 2012

detalles

Si se trata de pedir, yo reclamo incansablemente.
Pero de todo eso que pido, quiero poco. Realmente quiero reducidas cosas con el alma; entre ellas.. un poquito de todo ese tiempo que tiene el mundo para darme. Unas horitas de todas esas que tiene una semana, un ratito de todos esos numerosos momentos que ofrece un día como el de hoy.
Me llevo conmigo cositas chiquititas, te dejo el resto para lo que quieras.
Detalles.

Perdón, esto- esto no tiene sentido.
Ya se que el tiempo nunca llega, no lo digas...

lunes, 10 de septiembre de 2012

Ella otra vez.

Te juro que no puedo. La empujo, pero no quiere irse más.
Ya funcionó una vez y quieta ahí se volvió mucho más fuerte; primero para escapar, y después para mantenerse.
Está dentro mío y en total libertad; la pobre lo dice todo, lo expresa... y lo peor es que lo siente.
Todo el tiempo, dando vueltas, dando patadas, tratando de salir por algún lugar.
La odio.
Si no cierro los ojos lo vas a ver, yo se que me vas a descubrir con la verdad entre mis ojos. ¿como la pienso disfrazar? Todo un desastre.

Le tengo miedo, le tengo mucho mucho miedo.
¿qué es lo peor que podría pasar?
Demasiado.
Lo peor ya es demasiado. Lo menor es escandaloso, por donde lo mire.
Entonces pensando donde la dejé ir si la tenía tan controlada, recuerdo la mañana en la que estaba despierta mirando por la ventana de tu habitación.
Cada partícula de mí estaba disfrutando de una forma tan macabra...
ahí yo ya estaba siendo ella.

Si te quiero echar la culpa.. puedo. ¿Pero para qué? Echar culpas es una estupidez cuando sabés cual es el verdadero motivo. Ella quiere echarte la culpa, siempre me hizo lo mismo..

Espera... si ella soy yo.
Soy... yo. 
Tengo miedo de estar enloqueciendo.
Me estás-... No. Me estoy. Me estoy volviendo loca.

lunes, 3 de septiembre de 2012

pensamientos entre escritos

Como un papel plegado sobre sí mismo.
Muchas veces. Infinitas casi, porque siempre se puede un poco más.
Me pregunto ¿cuántas caras habrá? ¿cuántos lados?
y ¿cuántos mundos hay? ¿cuántos yo tengo?
In-con-ta-bles.

Es tan domingo que me muero, pensé.
Pero no una de esas muertes lentas y sufridas, es una muerte danzante, feliz, con música de fondo. ¿Será septiembre que me hace sentir así? Estaba contenta, a pesar de que la realidad es tan heterogénea que asusta. Me toma por sorpresa porque es extraño vivir en dos lugares al mismo tiempo.
Aunque no, nadie me entendería. ¿Acaso estoy volviéndome loca? Es una sola.
Mi vida, mis idas, mis viajes, mis vueltas siempre a casa- aquí en mi interior.
Un poco caóticas, me doy el gusto de revolver mis caminos porque al valle lo se de memoria de tanto transitar.
Voy entre mis tierras, pisando mucho pasto mojado.

Sin darme cuenta cloné tantas vidas imaginarias que las voy recorriendo de pasada, puedo quedarme en la que quiera si se pone todo muy feo; me cambio, voy mutando. Me refugio donde no hay quién ignore, donde no sea una elección disyuntiva. Me refugio donde se hace y no se dice, donde lo que se toca sólo se ve en la oscuridad.
Están en mi cabeza, ese es el problema. Salir al mundo, vivir cerca de otros que tienen otros mundos, y otros caminos, tanto como ellos quieran, tantos que yo ignoro... Vivir en el mundo de los mundos, es muy problemático.
¿se tocarán alguna vez los míos con los tuyos? ¿serán parecidos?
¿cuántos habrán en tu universo? ¿serán como el papel?

Hoy estuve bailando donde no hace frío, donde hay sol, camino a mi muerte dominical; me dejé merecerla, la que es dulce de vez en cuando se emparenta con la gloria de un buen momento bien vivido, es relajante, eso de tener algo por qué morir hoy. Por hoy dejo en paz a los tornados.
La realidad sigue siendo heterogénea, se separa más y más; se aleja. De mí, de todo.
En la realidad no tengo opciones de refugio.
¿pero qué importa como sea?
En tu realidad vos bailás con quién quieras, yo bailo sola; acá, en mi metro cuadrado. En mi universo, en mi mundo de mundos subalternos, que también es una clase de existencia.

...
Por eso, en serio, ¿qué importa?

sábado, 1 de septiembre de 2012

Adios, Augusto.

No suelo echarle la culpa a los meses, solo marcan tiempos, pero este último no fue mi mejor período del año. Se nota en mis escritos, o en sus ausencias. Mi cuaderno, estuvo sudando frases contradictorias, llenas de idas y vueltas, con desequilibrios y descompensaciones que hasta casi me llevan al médico.

Tal vez agosto fue revelador para lo que estoy acostumbrada a soportar, bastante crudo por cierto porque las cosas parecieron venir sin anestesia: uno no siempre ve lo que le gustaría, y se convierte en algo doloroso cuando tiene que abrir los ojos por motivos obvios.
Empiezo a preguntarme como logré sobrevivir a ciegas, ¿cómo he soportado todo este tiempo de pie?
Ya no importa.
El hecho concreto es que camino al colectivo me atacó una sensación que no podía catalogar, pero era tan fuerte que tampoco pude dejar pasar. Lo que me atormentaba estaba claro, solo faltaba analizarlo, entenderlo.

La gran diferencia entre sentir enojo y decepción es que después de la última nada vuelve a ser lo mismo.
Es decisiva, tajante y cruel. Se sabe que nunca jamás vuelve la percepción que se tenía.
Sigo teniendo esta mezcla de las dos- es desesperante: juntas se potencian.
Ya se fue agosto y se lo llevó casi todo, aquello que al menos creía tener, ya no se cuanta verdad conserva la expresión "lo que tenía" y prefiero manipularla con guantes puestos. Lo que sí dejó en el aire fueron estas dos cosuchas que desearía efectivamente eilminar, pero por ahora no puedo.
Ahora septiembre dice que me lo devuelve de a cuotas, se quiere hacer el amigo.
No confío. En nadie, ya no puedo, ya no debo otra vez sentirme así.
Bienvenido igual, mes de las flores... ¿que otra cosa puedo hacer sino recibirte?
De todos modos quedé con nada.