jueves, 26 de abril de 2012





















Esta obra de Stupia refleja perfectamente 
las cosas que tiendo a hacer con mi vida
cuando no se que hacer con ella.

Está bien, puedo sola, gracias.
También recomiendo filtrar entre mis comentarios sarcásticos y los reales, a menudo no indico cual es cual por razones obvias.

martes, 24 de abril de 2012

Cosas que siempre funcionan:

Dale, haceme mierda.
Dame con lo peor que tengas, mentí alocadamente, a niveles intolerables; chamuyame como a ninguna.
Haceme creer que soy la única, que no hay más allá atras, que no hay tal lista, que no soy un número y menos de los del final; haceme ignorar también lo que hiciste el sábado después de dejarme, porque si no lo confesás es como si no hubiera ocurrido en la realidad.
Haceme pensar que me extrañas, y al instante siguiente continuá diciendo que pensaste en mí todo el día, casi desesperadamente, y que no hiciste otra cosa porque no te dejé de perturbar.
Decime locuras que me hagan sonrojar, barbaridades inmensas que desvelen por las noches, atacame salvajemente con cosas sin sentido, arrancame la ropa solo con tu mirada y agarrame de la cintura con fuerza y táctica de galán telenovelezco.
Vos seguí nomás. Texteame, maileame, llamame, y si es necesario hasta skypea conmigo con tal de verificar una y otra vez que me tenés ahí, bailando a tu alrededor con cara de boluda hechizada..


Pero lo que sí: no boludees con otra. 
Seamos grandes, no me boludees histéricamente con otra porque eso sí que no funciona; y lo comprobé eh, no funciona.
Rajá de acá si vas a hacer tremenda boludez.



Encierro este texto dentro de 
"cosas que alguna vez quise decir en voz alta pero nunca pude, 
entonces lo redacté".


lunes, 23 de abril de 2012

take me out tonight


Siempre he tendido a esconder.. tal vez como forma de protegerme, nunca lo sabré ni espero hacerlo. 
Me acostumbré y siempre se sintió bien desde el primer momento. Hace tanto que no comparto algo tan enlazado con mi interior que me siento extraña cuando lo hago, como si dijese algo que no se nombra, como si despertara algún muerto. O más bien como si me protegiese de algo, o de alguien, aunque nunca supe bien por quién tenía que callarme (pero lo hago).

Se siente bien descargar, lo acepto, pero soy consciente que estoy arruinando la ilusión; porque cuando se dicen las cosas en voz alta ya no hay chance de que pase; ya no se puede ver atrás, es un paso decisivo. Hoy voy a dar ese paso, haciendo caso omiso a la regla y esperando que de todas formas algún día venga ese día y se cumpla, guardándome la última luz de emoción allá abajo de todo, por si ocurre y estoy desprevenida.


Cada vez que escucho esta canción, desde que la conocí, siento como si en algún momento me vas a pasar a buscar. No importa por donde, pero nos vamos. Tampoco está el lugar, pero arrancás para allá, tan decididamente que da la impresión de que sabés exactamente para donde no ir. Mientras me sonreís, claro, como si compartiésemos la armonía de irnos y tal vez no volver, porque no tenemos otro lugar que este, que sigue sin ser un lugar.
Tenés esa decisión que enamora, que enjaula, porque no hay duda en tu interior; esa firmeza es la que me dice que nunca podré ser de alguien más, menos en este momento. Se siente hermoso, aun sin sentirlo, y se siente especial, porque este momento es nuestro.
Nuestras almas y nuestras mentes están juntas, una al lado de la otra. 
Precioso.

Pero no se quién sos.. no se si sos una ella o un él; no se si existís, ni si vivimos cerca, no se si me vas a querer o lo harás por aburrimiento, no se si me vas a estar esperando como yo a vos, ni siquiera se si aun nos conocemos o estamos tanteando en la oscuridad por lados distintos.
Aun que me siento tan segura que va a ocurrir que sonrío cuando lo imagino; si no pasa antes de morir va a ser seguramente una decepción mi vivir, mientras aguardo.
No se quién sos, pero te estoy esperando, y cuando aparezcas con esa mirada única te voy a reconocer.

Y me pregunto a cuantos nos está pasando lo mismo.

jueves, 19 de abril de 2012

Descansa



Escribí en twitter casi sin pensarlo: "ese momento de la noche donde no te querés ir a dormir, aunque lo necesites, porque sería aceptar muchos otros hechos."
No quiero dormirme todavía, aunque esté cansada, aunque lo necesite; no quiero acostarme y dejar que este día pase como si nada, y confundirlo con otro jueves del mes.
No quiero entender porque no quiero dormirme, pero quisiera hacerlo, para poder apoyar la cabeza y al fin soñar cosas que al otro día no entiendo.
De hecho estoy escribiendo, porque hay tantas cosas que no quiero aceptar, que las podría enumerar y no cansarme; no quiero aceptar cosas superficiales, como no quiero aceptar que tengo la edad que pensé que nunca tendría. Que mañana me levanto temprano, y que mañana voy a correr de un lado para el otro. No quiero aceptar que me gusta.

En todo este tiempo me olvidé de muchísimas cosas, como el entrenamiento que había logrado a aceptar las cosas sin quejarme tanto.
Además me olvide de como escribir interesantemente. Me olvidé que dejé que pasara eso que siempre dije que nunca dejaría. No me voy a olvidar otra vez, lo juro, que eso no puede pasar de nuevo.
Olvidé lo que se dice cuando no hay que decir lo que estás pensando, en la cara que se pone cuando eso que estás pensando no puede ser exteriorizado; me olvidé como mentir para que no se den cuenta todo eso que nadie debería saber, pero por algún motivo se lo dijiste a unos cuantos y que al fin no afecta en nada, pero hay gente en el mundo que sabe más de mí de lo que debería...
"¿Qué pasaría si juntáramos todas las verdades que todos sabemos del otro?" sería un despelote.
Seremos siempre un conjunto de secretos que guardamos sin jamás dejar ir.
Me olvidé de como reprimir la alegría que no debería tener en ciertas ocasiones, me olvidé de como dejar ir.
Estoy mintiendo, jamás aprendí a dejar ir.
Sigo sin aceptar los hechos que me mantienen desvelada.
Tal vez no vaya a descansar esta noche, ni tantas otras noches, hasta que resuelva lo que encierran estos nudos en sus interiores.